La película de la semana: Philomena

"El final de la búsqueda será llegar al comienzo y conocer el lugar por primera vez"

Bajo esta cita de T.S. Eliot, gira la desgarradora historia basada en hechos reales narrada en la película. Un filme que despertará en el espectador un cúmulo de sentimientos irreprimibles.

  La película narra la vida de Philomena Lee, una mujer irlandesa que confiesa a su hija que, 50 años atrás, engendró un niño en un convento de monjas, el cual fue dado en adopción por las monjas debido a que la madre, adolescente, no estaba casada ni tenía recursos para pagar los gastos del parto. Así, Philomena, acompañada por su hija y un periodista, emprenden un viaje para buscar a su hijo y poder disfrutar del niño que dio a luz, aunque sea sólo por unos instantes.

En el largometraje, el director Stephen Frears combina a la perfección el dramatismo propio de una historia tan dolorosa como esta, con los momentos cómicos que nos deja el personaje al que da vida Philomena en la búsqueda de su hijo, haciendo de éste una auténtica obra de arte.

 Del filme cabe destacar la brillantísima actuación de Judi Dench, la actriz que da vida a Philomena; una interpretación tan desgarradora que resulta difícil no ponerse en su piel y sentir el sufrimiento que vivió en el convento y que mantuvo en su interior hasta que tuvo el valor de contar la verdad y ponerse en búsqueda de su hijo, todo ello sin perder la fe ni en Dios ni en su iglesia. Nos ofrece así una gran lección moral ya que, pese a todo el dolor, no guarda rencor a nadie y se muestra respetuosa en el convento que tanto daño le hizo.

Después de que este caso cobrara recientemente popularidad, el propio Papa Francisco se reunió con la verdadera protagonista de ésta historia (como ya he dicho, basada en una situación real), su hija y Steve Coogan, actor que interpreta el personaje del periodista y también uno de los guionistas de la película. A este encuentro asistieron como representantes de The Philomena Project, una campaña que pide al gobierno irlandés una ley que abra los archivos de adopción y que permita que las madres se puedan reunir con sus hijos, separados como consecuencia de una adopción forzosa.

Philomena Lee y Steve Coogan junto con el Papa.

Sin duda, recomiendo a todos ver esta película y tomarse un momento para recapacitar sobre el dolor, no sólo de Philomena, sino de miles de familias que, lamentablemente, se han visto en esta circunstancia, más habitual de lo que parece, según se ha podido ver los últimos tiempos.



¡Esperamos que os guste y, si ya la habéis visto, no os olvidéis de comentar qué os ha parecido!